Hoy hablamos sobre la relación del glaucoma con hábitos como el consumo del tabaco, la marihuana o el alcohol. ¿Sabes cuál de ellos podría ayudar en el tratamiento del glaucoma? Descúbrelo en este artículo.
Cómo afecta al glaucoma el consumo de tabaco, marihuana o alcohol
Relación entre el tabaco y el glaucoma
Los estudios sobre hábito tabáquico y glaucoma no demuestran que exista una relación entre el consumo de tabaco y la incidencia de glaucoma. De todas formas, existen pocos estudios amplios sobre el tema y algunos sí que señalan que la probabilidad de padecer glaucoma aumenta cuantos más paquetes fumados por año.
Relación entre marihuana y glaucoma
En cuanto a la marihuana, los estudios con distintos cannabioides muestran que, tras su consumo, disminuye la presión intraocular (PIO) en hasta un 30 %. Su máxima bajada se produciría a las 2 horas y la duración del efecto sería de unas 3 horas y media. Su consumo produce además una disminución del flujo vascular lo que sería perjudicial para el paciente glaucomatoso, contrarrestando así su efecto beneficioso.
El hecho de que la duración del efecto sea corta, sumado a los efectos secundarios como taquicardia, hipotensión y efectos mentales de sobra conocidos, hacen que el uso de la marihuana como parte del tratamiento para el glaucoma sea desaconsejable. Además, la marihuana, como los demás canabioides, produce dilatación pupilar (midriasis) que han provocado casos de glaucoma de ángulo cerrado en pacientes con ángulo estrecho.
Relación entre el alcohol y el glaucoma
Por último, el consumo de alcohol no se ha visto relacionado con una mayor incidencia de glaucoma. Se sabe que la uva tiene sustancias antioxidantes como por ejemplo el resveratrol (sobre todo presente en el vino tinto) que pueden ser beneficiosas para reducir las enfermedades cardiovasculares. Estudios en animales han demostrado que el resveratrol es un potente inhibidor del estrés oxidativo a nivel de la malla trabecular por lo que actuaría como neuroprotector de las células ganglionares. Todo lo anterior, hace que su consumo moderado, dentro de la llamada dieta mediterránea, se pueda aconsejar.
Parte del contenido de este artículo se ha inspirado en el libro «Hábitos de vida y glaucoma. Guía Práctica», cuyos autores son el Dr. Alfonso Antón López y el Prof. Javier Moreno Montañes. Editado por Laboratorios Thea en 2018.